viernes, 18 de abril de 2014

Reseña Ocho apellidos vascos

Me están pidiendo por aquí unos chistecitos, con tol' arte que yo tengo.

La gran reverenciada 8 apellidos vascos es hilarante y da gusto ver a Dani Rovira. Nunca los tópicos fueron tan divertidos.





Director: Emilio Martínez-Lázaro.
Intérpretes: Dani Rovira, Clara Lago, Carmen Machi, Karra Elejalde, Alfonso Sánchez, Alberto López, Aitor Mazo, Lander Otaola.
Año: 2014.
Duración: 98 min.
Género: comedia romántica.

Sinopsis: Rafa (Dani Rovira) es un andaluz con mucho arte que no ha tenido que salir jamás de su Sevilla natal. Todo cambia cuando conoce a la primera mujer que se resiste a sus encantos: Amaia (Clara Lago), una vasca, pero vasca vasca. Decidido a conquistarla, se va a un pueblo de "las Vascongadas", donde acaba haciéndose pasar por vasco para que el padre de Amaia no lo mate, literalmente, mientras intenta conquistar a la chiquilla. Adopta el nombre de Antxon, seguido de ocho apellidos vascos: Gabilondo, Urdangarín, Zubizarreta, Arguiñano, Igartiburu, Erentxun, Otegi... y Clemente.


Mucho bombo se le ha estado dando a 8 apellidos vascos. Con razón. No soy una persona muy patriótica en el tema del cine, y demasiado tenían que hablarme de una película española como para que me animase a ir al cine a verla. Si a eso se le suma que uno de los protagonistas es Dani Rovira, un hombre al que venero desde hace años y del que me he visto todos sus monólogos, la estrada estaba comprada.

La historia comienza cuando, en un chiringuito sevillano, Rafa, amante de la gomina, las mujeres y el Betis, conoce a Amaia, una vasca de pura cepa. Tras una noche de pasión frustrada, Rafa se da cuenta de que se ha enamorado de la chiquilla y decide irse a ''las Vascongadas'' ha declarársele. Ella obviamente se resiste, pero cuando su padre vuelve al pueblo, necesita que Rafa se haga pasar por vasco y además por su novio. Así, en vez de necesitar dos días para recuperar a Amaia, Rafa consigue tres días con ella y por tanto algo más de tiempo para conquistarla (a ella y a su padre).

Como digo más arriba, nunca los tópicos fueron tan graciosos. Poniendo manga por hombro tanto a sevillanos como a vascos, siendo estos el tema principal, el espectador de risa fácil se desternillará con 8 apellidos vascos. Y quien se intente resistir, acabará sucumbiendo a su chispa, su sentido hilarante y su comicidad para todos los gustos. Comedia ligera que sabe arrancar y mantener el ritmo hasta el final; tiene un magnífico sentido del ritmo. Quizá lo que le resta un poco es que la dirección no es nada especial, por lo que técnicamente la película pasa desapercibida, no transmite mucho artísticamente, dejando el total protagonismo a sus actores y a un guión que es inteligente y ágil, con diálogos brillantes y salidas de tono divertidísimas y oportunas.

A pesar de que Dani Rovira no acostumbra a presentarse como actor (aunque el ser monologuista deriva a tener un sentido de la interpretación desarrollado), es lo más atractivo de la película. Está sensacional, acertado, desternillante como él es y es el arranca la mayoría de las escenas de humor. Sus caras, su incomodidad notable ante la imponente presencia del padre (un basto, burro e igual de divertido Karra Elejalde, que junto a Rovira es lo mejor de la película), su facilidad para cambiar su marcado acento andaluz por uno vasco (como si hubiera nacido ya con él incorporado) y su facilidad para sacar más de una sonrisa, risa o carcajada son fascinantes. Clara Lago se ocupa de ser la aportación principal femenina, una vasca con muy mala uva que tendrá que lidiar con el personaje de Rovira en su pueblo y conseguir que le agrade a su padre. Quizá lo más gracioso de ella es los innumerables tacos que suelta a diestro y siniestro. Y luego está Carmen Machi, que aunque habría estado bien verla más y darle más protagonismo, podemos gozar de una actriz que igual que se marca un drama intenso, sabe cambiar fácilmente de registro para una comedia donde se luce. No olvidar tampoco a Alberto López y Alfonso Sánchez como secundarios, el par de amigos de Rafa que tienen sus merecidas par de escenitas de protagonismo.


No lo olvides: Dani Rovira, sencillamente. Son innumerables las escenas destacables del cómico; se hace completamente con el film cada vez que abre la boca. Y le sigue Karra Elejalde, otro grande de esta película, sobre todo cuando que comparte escena con Rovira. La continuidad que tiene la película hace que el desenfrene de humor no deje de pisar el acelerador.
Olvídalo: Carmen Machi se podría haber aprovechado mejor; hay escenas que pedían aún más desmadre y no llegan a ese punto; y me ha faltado, aunque fuera en los créditos, que Rovira se marcara un buen monólogo.

En conclusión: Su éxito taquillero y las cinco semanas que lleva liderando la taquilla es más que merecido. Más que nada se debe a un elenco que funciona y sabe arrancar risotadas, porque técnicamente la película tiene poquito. Gustará a todo el mundo.

NOTA: 9/10

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